Uno de los monumentos singulares de la ciudad de Tijuana es el “Monumento al Libro de Texto Gratuito”. Dicho monumento ha sido uno de los más antiguos y tradicionales que varias generaciones de tijuanenses han observado por 56 años, ya que se inauguró el 26 de septiembre de 1963. Se localiza a la altura del Club Campestre de Tijuana, en donde se unen los bulevares Agua Caliente y Salinas. Fue construido por mandato del presidente municipal Ildefonso Velázquez y con motivo de honrar la labor impulsada en el ámbito de la educación gratuita por el presidente de la república Adolfo López Mateos.
El proyecto
La construcción del monumento fue a raíz de que el presidente López Mateos decretó en 1959 la creación de la Comisión Nacional del Libro de Texto Gratuito en México. Cabe mencionar que fue precisamente durante la gestión administrativa del licenciado Velázquez que se creó la Dirección de Acción Cívica y Cultural, siendo su primer titular el profesor Rubén Vizcaíno Valencia. Con la creación de esta dependencia se promovieron los valores cívicos, históricos y culturales entre la comunidad tijuanense. En tal contexto se construyó el Monumento al Libro de Texto Gratuito en 1963.
La inauguración
Fue el día 26 de septiembre de 1963, cuando se develó el Monumento al Libro de Texto Gratuito. El acto inauguratorio corrió a cargo del presidente de la república Adolfo López Mateos en una gira de trabajo que desarrolló por Baja California, quien por cierto, también inauguró por esas fechas el edificio de la Escuela Preparatoria de la Universidad Autónoma de Baja California en la colonia Juárez y la termoeléctrica de Rosarito. En su informe de gobierno, Velázquez señaló que fue construido “por el Ayuntamiento con la cooperación de numerosas instituciones y ciudadanos, que comprendiendo la importancia y trascendencia de la cruzada nacional que el Gobierno de la Federación ha realizado para dotar a los niños estudiosos de México sus libros de texto gratuitamente, aportaron su donativo para perpetuar con esta obra el patriotismo e interés puestos en juego en esta promoción”.
Anexo
“Fue emotiva la inauguración del Monumento al Libro de Texto”, por el reportero R. T. Fuentes, publicada El Mexicano, el día 27 de septiembre de 1963. Hondamente emocionado el presidente de la república descubrió ayer el Monumento al Libro de Texto Gratuito erigido aquí por el IV Ayuntamiento de Tijuana y recibió del alcalde, Lic. Ildefonso Velázquez, un pergamino cuyo contenido conmovió al jefe de la nación. La inauguración de esta obra, única en su género en el país, tuvo lugar a las 17:25 Horas, última etapa de la visita de trabajo que tuvo en la ciudad ayer el Lic. López Mateos. El alcalde dijo al presidente de la república que desde el 12 de febrero de 1959 fecha en que nacieron a la vida los libros de texto gratuito “por primera vez en la historia se está cumpliendo la Constitución y realizándose plena justicia social en materia educativa”. Añadió “nuestros niños pobres ya no pedirán prestados sus libros a los niños ricos, como lo hicimos nosotros”, hechos lo cual entregó un pergamino y recibió el abrazo del Lic. López Mateos. Tres mil quinientos niños de la IV Zona federal contemplaron la escena, bajo un ardiente sol que causó desmayos entre los pequeños escolares.
Las características
La ubicación del monumento se dio en el inicio de la cuchilla que une al bulevar Agua Caliente con el Salinas, frente a las instalaciones del Club Campestre de Tijuana. El lugar donde está el monumento es exactamente donde se encontraba la Torre de Agua Caliente, la cual desapareció a causa de un incendio en diciembre de 1956. Algunos sectores de la población de Tijuana de la época consideró levantar una réplica de dicha torre pero nunca se concretó el proyecto. Por ello cuando surgió la idea de construir un monumento sobre el libro se consideró como idóneo ubicarlo en ese sitio. Este monumento es el único en toda la república mexicana. El monumento está construido de ladrillo y de cemento. El elemento principal es un libro de texto gratuito, acompañado de la bandera mexicana. La ilustración del libro de texto se ha modificado, la original era la portada del libro de quinto año de primaria con las ilustraciones de Miguel Hidalgo y Costilla, José María Morelos y Pavón, Vicente Guerrero y Francisco Javier Mina. Al pie de la figura del libro se encuentran un grupo de siete niños que tienen su vista fijada sobre el libro en signo de admiración hacia el texto que llevarán en la escuela primaria.
TIJUANA LEE 